




Una batalla en Sevilla en la guerra contra el urbanismo feroz
Asociación Herpetológica Española
Jesus Díaz Rodríguez (byosss@gmail.com)
El caso del Parque fluvial del Tamarguillo es un ejemplo de cómo, en ocasiones, la organización social y el sentido común supera el afán especulativo y ofrece resultados sorprendentes y esperanzadores en las ciudades.
La situación privilegiada del arroyo Tamarguillo, junto al aeropuerto de San Pablo, y su funcionamiento amortiguador, a caballo entre los usos rurales al norte y los propiamente urbanos, contrastan con su papel potencial como corredor estratégico en la red de espacios libres de la ciudad, conectando zonas verdes y lugares de interés comunitario incluidos en la Red Natura 2000. El parque del mismo nombre, se trata de un entorno único en la capital que preserva un humedal de valor ambiental, la cabecera y cauce natural del emblemático arroyo, y un complejo de múltiples yacimientos: paleontológico, prehistórico y romano, con un centro de producción artesanal ligado a un caserío como los que jalonaban la “Via Augusta” entre los núcleos urbanos de Carmo e Hispalis. La presencia de numerosas especies de herpetos, como el sapillo pintojo y moteado ibérico o el eslizón tridáctilo ibérico, aves como el martinete, el cernícalo primilla, la lechuza o el ansar común, peces como el barbo gitano y pequeños mamíferos, como el lirón careto, lo convierten en un notable lugar de refugio, paso y reproducción a lo largo del año.
La riqueza de este espacio se ve amenazada por el trazado de una nueva Ronda Urbana, la SE-35, que vendría a enlazar sobre un talud la avenida Emilio Lemos, en Sevilla Este, y los terrenos de San Nicolás Oeste donde se asentará una gran superficie comercial y la segunda tienda IKEA en Sevilla con un coste ambiental considerable. Para instalarse en el municipio, la multinacional sueca exigió a la Gerencia Municipal de Urbanismo una recalificación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), triplicando la superficie edificable, operación inmobiliaria que se realizó eficazmente en favor de promotoras y propietarios de los terrenos. Frente a este absoluto despropósito, fueron presentadas a final del año pasado una treintena de alegaciones al proyecto de SE-35 en la oficina de Demarcación de Carreteras, hasta el momento sin respuestas. La Asociación Herpetológica Española, integrada en una Plataforma para la Defensa del Parque junto a numerosos colectivos y particulares de la ciudad, se han posicionado claramente a favor de la diversidad natural, cultural y social de este paisaje. La población colindante, el parque y la actividad agrícola de los terrenos adyacentes se verían afectados de forma radical por su trazado, lo que va en contra de las políticas europeas de sostenibilidad. Según el alcalde, la operación está estrechamente ligada a la implantación de la zona comercial y se convierte de este modo en un acicate político con el aliciente de la creación de empleo.
Recientemente, sorprendió la noticia en prensa sobre la apertura de un expediente sancionador del Parlamento Europeo al Ayuntamiento de Sevilla, al considerar que se vulneraba la Directiva de Impacto Ambiental. La Gerencia Municipal de Urbanismo ya valora la alternativa de construir un acceso directo sin necesidad de atravesar el parque cercenándolo en dos, como se viene insistiendo desde hace más de diez años, a través de las mesas participativas del PGOU, el metaplan y las mesas sectoriales de la Oficina del Plan de Sevilla, donde los movimientos sociales han apostado siempre por una solución que no conlleve la destrucción de un entorno sevillano único. De confirmarse, se habría puesto fin a un intento más de continuar el modelo económico que nos ha traído hasta la actual crisis. Pero hasta entonces, la situación genera incertidumbres:
¿A qué se debe tanta urgencia y celeridad para construir la Ronda Urbana (paradoja que no caracteriza precisamente a nuestra administración) cuando ni siquiera se ha concluido la anterior SE-40?, ¿por qué esta polémica obra se presenta como una prioridad absoluta para el gobierno municipal? y, si lo que realmente prima es acabar con el desempleo, ¿por qué no se desarrolla el tejido productivo existente con el mismo interés que se tramitan las grandes áreas comerciales?
Como señala Ecologistas en Acción, la SE-35 no figura ni en el Plan de Ordenación del Territorio de Andalucía, ni en el Plan de Transporte Metropolitano del Área de Sevilla, ni en el Plan de Ordenación del Territorio de la Aglomeración Urbana de Sevilla. De hecho, solo está incluida en el PGOU de Sevilla que el Ayuntamiento tiene la obligación de revisar —como la propia Junta de Andalucía reconoce— por ser contrario al principio de sostenibilidad de dichos planes. Otros municipios, como Mairena del Aljarafe y Salteras, ya han eliminado esta infraestructura de sus planeamientos por ser innecesaria para la movilidad metropolitana.
La apertura del expediente en Bruselas no trata acerca de la calificación ambiental de las infraestructuras del PGOU sino sobre el trazado de la SE-35 y su construcción a través del punto crítico, el Parque Fluvial del Tamarguillo, que afectaría al patrimonio arqueológico y biológico de esta ciudad. La polémica y finalmente el bloqueo del proyecto parten del incumplimiento de la normativa ambiental, el mal uso de los varios millones invertidos de fondos europeos FEDER y los 50 millones de euros públicos que tendríamos que gastar los y las ciudadanas, asunto que en el panorama actual más que un derroche es una obscenidad.
A pesar de que la alternativa propuesta de acceso directo abarata la obra, tiene un plazo de construcción menor y reduce considerablemente el impacto en esta área de la ciudad, no podremos alegrarnos hasta que no se abandone definitivamente el trazado de la nueva ronda urbana en Sevilla. Porque, en caso de llevarse a cabo a través del parque, se estaría legislando en favor de intereses económicos multinacionales, no se primaría el empleo y el desarrollo del comercio local, tocado de muerte, y en lugar de potenciar el transporte y las obras públicas, como la rehabilitación preferente en este sector clave de la ciudad, se seguiría mirando para otro lado, en contra de la conservación, la herencia cultural, natural y la salud de las personas. El planteamiento es asumir el reto, desde todas las posturas, para que esta decisión no sea transitoria, sino definitiva, evitando en la medida de lo posible futuros conflictos sociales (como ocurriera en el precedente barrio de Gamonal, Burgos).
Ubicación estratégica del Parque Tamarguillo respecto a los principales cauces y espacios con vocación de corredor verde en la red de espacios libres de Sevilla. Fuente: Antonio García, Geógrafo de la Universidad Pablo de Olvide.
SALAMANDRAS Y BAÑERAS
La salamandra común es un anfibio antaño frecuente en el oeste de la Comunidad de Madrid, que hoy se encuentra amenazado al haber perdido muchos de sus puntos de reproducción. Las hembras paren larvas vivas, y para ello deben acudir a manantiales, arroyos o a antiguos abrevaderos. Allí a veces encuentran bañeras que son verdaderas trampas mortales, pues no pueden escapar y acaban ahogándose.
La IBA (International Birdwatchin Association) organiza un concurso en la Feria de Naturaleza Madbird (www.madbirdrace.es) para recaudar fondos para sustituir las bañeras por abrevaderos integrados en el entorno y que además dispongan de rampas para facilitar la salida de las salamandras tras parir o tras completar su metamorfosis.
Más información:
Madbird Race
http://www.madbirdfair.es/actividades/madbird-race/
II seguimiento de galápagos en Castilla y León
Estimados compañeros,
Con motivo de que la AHE (Asociación Herpetológica Española) nombró en 2013 al galápago europeo (Emys orbicularis) especie del año la AZCN (Asociación Zamorana Ciencias Naturales) creó una iniciativa específica para realizar el seguimiento de esta especie. Colateralmente han surgido inclusiones a la idea originaria y se propuso, también, realizar el seguimiento del galápago leproso (Mauremys leprosa), así como el seguimiento de otras especies exóticas, típicas en capitales de provincia, embalses y zonas turísticas. En muchos casos exentas ya de nuestras especies.
La idea se gestó para la provincia de Zamora, ya que la asociación a esta provincia pertenece, sin embargo creemos que también sería interesante e importante conseguir la mayor difusión posible y que al igual que otras especies se pudiese ampliar el rango de actuación al menos para toda CyL. Obteniendo una herramienta útil cara a la legislación y gestión de estas especies.
Los seguimientos se basan en la metodología del SARE (Seguimiento de anfibios y reptiles de España), similar al SACRE.
Los seguimientos se basan en sencillos conteos de individuos soleándose o nadando que se puedan observar tanto desde un punto fijo (de media hora a una hora de espera) o bien tramos de medios acuáticos realizados a pie. Es importante que se especifique la forma de hacerlo para siempre realizarlo y tomar los datos del mismo modo.
Los seguimientos se realizan cuatro veces al año, aunque cómo mínimo deberían realizarse dos. Lógicamente cuantas más salidas se hagan más fiable será la estimación.
Dado que son especies con dinámicas de crecimiento lento y con una baja tasa de reposición se considera que no es “obligatorio” realizar todos los años un seguimiento. No obstante siempre es preferible hacerlo.
Las fechas de las salidas se consideran apropiadas desde abril a agosto. Aunque se puede expandir el rango de actuación a marzo y septiembre dependiendo de la climatología y de las circunstancias de cada voluntario. Siempre intentando coincidir de año en año, en la medida que se pueda, en las fechas de muestreo, temperatura y hora.
El número de medios acuáticos elegidos por cada voluntario no es condicionante. Lo ideal es realizar el mayor número de medios por cuadrícula UTM 10x10km sin embargo es preferible que se haga un punto e ir aumentando con los años. La experiencia nos indica que esto es mejor ya que de otra forma se tiende a “quemarse” rápidamente y acaba uno por dejarlo.
Finalmente decir que este tipo de recopilación de datos es compatible con otros seguimientos, sobre todo para el caso de observación en puntos fijos haciendo esperas en medios acuáticos. Por ejemplo de aves. Lo que a priori no supondría un sobre-esfuerzo considerable.
Los datos son volcados a la página web de la AHE. En nuestro caso lo estamos realizando en nombre de AZCN, siempre anunciando en observaciones al autor del seguimiento. No obstante siempre se puede, a petición del voluntario, realizarse en nombre de otra asociación o individualmente. En este último caso proponemos que el propio autor introduzca los datos el mismo como usuario particular del proyecto SARE anunciándonos, si quiere, su seguimiento específico en galápagos para que en el anuario le dejemos reflejado.
Para más información
atentamente
Gonzalo Alarcos Izquierdo (Coordinador)